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De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), la salud es un estado de plenitud física, mental y bienestar social, no solamente es la ausencia de dolencias o enfermedades.
Diversos estudios han mostrado que la contaminación está asociada a más casos de enfermedad mental, empeora la capacidad de juicio y el desempeño escolar. Además, podría influir en los niveles de criminalidad.
Son diversos factores los que afectan la salud mental. La OMS estima que cada año, siete millones de personas mueren debido a la contaminación del aire. Además de aumentar el riesgo de enfermedades físicas, el aire contaminado podría estar aumentando también los trastornos mentales.
Factores que perjudican la salud mental
Contaminación del aire
Según un estudio publicado en marzo de 2019, por la investigadora Joanne Newbury, del King’s College de Londres, adolescentes expuestos al aire contaminado presentaron mayores riesgos de tener episodios psicóticos, como paranoias.
Joanne no analizó las causas, pero el estudio coincidía con otras investigaciones que sugieren esta relación. «Esto se suma a las evidencias que vinculan la contaminación del aire a problemas de salud física y demencia. Si es malo para el cuerpo, es de esperar que sea malo para el cerebro», afirmó.
“…hay estudios que muestran que la exposición a varios contaminantes del aire también causa inflamación en el cerebro. La partícula PM2.5 es particularmente nociva para el desarrollo cerebral porque puede causar daños en la estructura y en las redes neuronales y, como nuestro estudio sugiere, influye en el comportamiento de los adolescentes…”, afirmó la investigadora Diane Younan asociada a la Escuela de Medicina Keck, de la Universidad de California del Sur.
Otro estudio también confirma algo similar. Científicos de la Universidad de Stanford, Estados Unidos, encontraron una asociación entre la contaminación del aire con enfermedades mentales, como trastornos bipolares o depresión. Los resultados, mostraron que diversos problemas de salud están relacionados por la contaminación del aire, como los padecimientos respiratorios, pero también revelaron una incidencia consistente sobre la salud del cerebro.
Alimentos ultraprocesados
Otros expertos en neurociencia, psicología y psiquiatría, publicaron un estudio clínico en Royal Society Open Science confirmando que, la llamada dieta occidental, provoca daños en las funciones del hipocampo y un debilitamiento del control del apetito.
Si en México limitamos el consumo de alimentos ultraprocesados, esto puede ser una estrategia efectiva para prevenir y tratar la obesidad.
Gran parte de los colorantes y saborizantes artificiales los han retirado del mercado en naciones de Europa porque se ha demostrado que provocan déficit de atención e hiperactividad en los niños.
Nuevas Tecnologías
El uso de dispositivos electrónicos también puede ocasionar daños psicológicos y neurológicos. Actualmente las personas comienzan a usar estos dispositivos desde edades muy tempranas. Debido a esto, es muy común el problema de déficit de atención en las clases, la hiperactividad y disminución en su capacidad de retención.
La neuróloga Sandra Espinoza, explica que el insomnio que produce el utilizar los dispositivos por la noche es la causa de falta de concentración.
El estrés y la ansiedad que se experimentan en los partidos de videojuegos se ven reflejados en enfermedades como la dermatitis e hidradenitis palmar. Así lo comentó la dermatóloga Luz María Dressendorfer, quien afirma que en la actualidad es más común que los síntomas aparezcan desde que somos pequeños, por el uso de videojuegos. La vista también se ve afectada con estos dispositivos debido a la disminución en el parpadeo que ocasiona la sequedad ocular.
Estudios señalan que durante una conversación se parpadea 22 veces por minuto, a diferencia de las siete veces que se parpadea mientras se está frente a una pantalla.
La tecnología nos facilita el desarrollo de distintas actividades de nuestra vida cotidiana, pero procuremos establecer límites en su uso para prevenir daños que pueden ser irreparables en nuestra salud física y mental.